Vivir con EM: Un proceso familiar
Mª Jesús Cruza. Socia de ADEMBI
La incertidumbre que conlleva el diagnóstico afecta a todos; en el caso del paciente, a la incertidumbre sobre la evolución de su enfermedad.Y en muchos casos los familiares no saben qué hacer para ayudar al afectado
Maria Jesus Cruza
La enfermedad es un problema familiar, no es un problema individual. Por lo tanto, ambos, el paciente y su familia, necesitan cuidados y apoyo, para aceptar la enfermedad y aprender a vivir con ella.
El hecho de que a un miembro de la familia se le diagnostique una enfermedad crónica e incurable, como la EM, tiene una serie de consecuencias inevitables para todos los componentes del núcleo familiar.
La incertidumbre que conlleva el diagnóstico afecta a todos; en el caso del paciente, a la incertidumbre sobre la evolución de su enfermedad hay que sumarle el hecho de no saber en qué medida el resto de los miembros de la familia le servirán de ayuda para afrontarla. Y en muchos casos los familiares no saben qué hacer para ayudar al afectado. La ayuda y la orientación de profesionales son fundamentales en estos casos.
«Día a Día»
Tener un miembro de tu familia con Esclerosis Múltiple es duro, pero poco a poco todo se supera. Os voy a contar mi experiencia con esta enfermedad.
Dios me ha puesto en el camino a la mujer de uno de mis hijos, quien lleva luchando con tesón y un gran esfuerzo durante los últimos 6 años, desde que le diagnosticaron Esclerosis Múltiple. El diagnóstico fue rápido y empezó a darse cuenta que la vida le iba a cambiar.
El primer brote lo superó sin secuelas, sin que fuera ningún impedimento para poder seguir trabajando con normalidad. Posteriormente tuvo algunas pequeñas recaídas, que afortunadamente también superó.
Pero el último brote fue más fuerte y es cuando pensó en trasladarse a Bilbao, ya que alguien le comentó que en esta ciudad, que es la de su marido, había un gran especialista en Esclerosis Múltiple. (Ellos vivían en Madrid).
La orientación que hemos recibido en ADEMBI ha sido una gran ayuda
Fue una decisión compartida el trasladarse de ciudad, ya que en Madrid la vida en sí no es nada fácil y menos con su enfermedad, y, además, en Bilbao estamos otra parte de su familia.
A su llegada a Bilbao fue recibida por el Dr. Alfredo Antigüedad, y un nuevo tratamiento y la Asociación de Esclerosis Múltiple de Bizkaia (ADEMBI), cuyo Centro, con su gente, profesionales de rehabilitación, etc., le han sido de gran ayuda a ella y a nosotros por la orientación que nos han dado. Su vida cotidiana ha mejorado mucho, hasta tal punto que de vivir con nosotros una temporada, actualmente viven en su piso con total independencia y pronto se podrá incorporar a su trabajo, que ha sido durante este largo periodo, su meta.
Desde aquí, mi agradecimiento a todas las personas de ADEMBI y de la Fundación EM, que con su ayuda, estímulo, cariño,… han hecho que mi hija política se encuentre en buen estado y se sienta apoyada, como también nos hemos sentido sus familiares.
La incertidumbre que conlleva el diagnóstico afecta a todos; en el caso del paciente, a la incertidumbre sobre la evolución de su enfermedad.Y en muchos casos los familiares no saben qué hacer para ayudar al afectado
Maria Jesus CruzaLa enfermedad es un problema familiar, no es un problema individual. Por lo tanto, ambos, el paciente y su familia, necesitan cuidados y apoyo, para aceptar la enfermedad y aprender a vivir con ella.
El hecho de que a un miembro de la familia se le diagnostique una enfermedad crónica e incurable, como la EM, tiene una serie de consecuencias inevitables para todos los componentes del núcleo familiar.
La incertidumbre que conlleva el diagnóstico afecta a todos; en el caso del paciente, a la incertidumbre sobre la evolución de su enfermedad hay que sumarle el hecho de no saber en qué medida el resto de los miembros de la familia le servirán de ayuda para afrontarla. Y en muchos casos los familiares no saben qué hacer para ayudar al afectado. La ayuda y la orientación de profesionales son fundamentales en estos casos.
«Día a Día»
Tener un miembro de tu familia con Esclerosis Múltiple es duro, pero poco a poco todo se supera. Os voy a contar mi experiencia con esta enfermedad.
Dios me ha puesto en el camino a la mujer de uno de mis hijos, quien lleva luchando con tesón y un gran esfuerzo durante los últimos 6 años, desde que le diagnosticaron Esclerosis Múltiple. El diagnóstico fue rápido y empezó a darse cuenta que la vida le iba a cambiar.
El primer brote lo superó sin secuelas, sin que fuera ningún impedimento para poder seguir trabajando con normalidad. Posteriormente tuvo algunas pequeñas recaídas, que afortunadamente también superó.
Pero el último brote fue más fuerte y es cuando pensó en trasladarse a Bilbao, ya que alguien le comentó que en esta ciudad, que es la de su marido, había un gran especialista en Esclerosis Múltiple. (Ellos vivían en Madrid).
La orientación que hemos recibido en ADEMBI ha sido una gran ayuda
Fue una decisión compartida el trasladarse de ciudad, ya que en Madrid la vida en sí no es nada fácil y menos con su enfermedad, y, además, en Bilbao estamos otra parte de su familia.
A su llegada a Bilbao fue recibida por el Dr. Alfredo Antigüedad, y un nuevo tratamiento y la Asociación de Esclerosis Múltiple de Bizkaia (ADEMBI), cuyo Centro, con su gente, profesionales de rehabilitación, etc., le han sido de gran ayuda a ella y a nosotros por la orientación que nos han dado. Su vida cotidiana ha mejorado mucho, hasta tal punto que de vivir con nosotros una temporada, actualmente viven en su piso con total independencia y pronto se podrá incorporar a su trabajo, que ha sido durante este largo periodo, su meta.
Desde aquí, mi agradecimiento a todas las personas de ADEMBI y de la Fundación EM, que con su ayuda, estímulo, cariño,… han hecho que mi hija política se encuentre en buen estado y se sienta apoyada, como también nos hemos sentido sus familiares.